Hace ocho años, el entonces secretario de prensa, Edgardo Imas, y Fernando Ruggero hallaron ocultas en una dependencia del club cuatro plaquetas a nombre de integrantes del plantel de Atlanta que disputó el Torneo Nacional de Primera División en 1974.Un conflicto con los jugadores profesionales hizo que el club afrontara todo ese certamen con juveniles amateurs.
Por entonces se les quiso agradecer a los futbolistas con la entrega de una plaqueta a cada uno, pero cuatro no pudieron ser entregadas por motivos que se ignoran.
Recuperadas luego de tanto tiempo, durante el intervalo del partido del sábado próximo, Atlanta entregará una de ellas, elaborada a nombre de Alfredo Ernesto Thomson. Así, treinta y nueve años después, se completará parte de esta historia y la distinción llegará al destinatario para quien había sido preparada.
Tras jugar en las divisiones inferiores de Atlanta y un fugaz paso por la Primera en 1974, Thomson se recibió de médico y hoy es un prestigioso y destacado neurólogo que, entre tantos pacientes, atiende a dos próceres del fútbol bohemio y nacional: Luis Artime y Carlos Timoteo Griguol.
Otras notas que podrían interesarte