Una nueva alegría, y adentro del Reducido

Lo que parecía un camino intrincado, finalmente se despejó en sólo cuatro días. Atlanta, que llevaba siete partidos sin ganar y empezaba a complicar su clasificación al Reducido, consiguió dos triunfos al hilo que le aseguraron su presencia en el certamen que dará el segundo ascenso a la B Nacional.

Este miércoles, con el 1-0 como visitante frente a Acassuso en cancha de Colegiales, el equipo de Mayor sumó su segunda victoria consecutiva y mostró una mejoría en lo futbolístico que permite dejar volar un poco los sueños que estaban guardados en la baulera.

Para este encuentro, Mayor se vio obligado a improvisar una línea de defensores con Palisi como lateral derecho en lugar del suspendido Collavini -Perujo tenía todavía una fecha por cumplir- y el retorno de Peláez por la punta izquierda para reemplazar a otro sancionado, Pinto.

Después de un primer tiempo en el que el local impuso condiciones en los primeros minutos y Atlanta fue torciendo de a poco el trámite a su favor, en el complemento apareció el único gol del partido. En una jugada que comenzó Díaz Villán en defensa, Flores envió al área rival el centro medido para que Godoy, a los 13, la mandara a la red y le diera el gol decisivo al visitante, como contra Los Andes.

Atlanta tuvo que sufrir hasta el final y hasta padeció por un rechazo ajustado de Díaz Villán que dio en el poste, pero también pudo haber aumentado con un contraataque que terminó en un remate de Galeano en el travesaño. Lo concreto es que el 1-0 final le dio la posibilidad de volver a festejar y asegurar su chance en el Reducido. El equipo será cuarto del campeonato en el peor escenario, y hasta conserva una chance matemática de alcanzar a Chicago en la punta, aunque eso ya entraría en el terreno de los milagros. Por ahora, bien vale festejar este nuevo despertar de un equipo que parecía haber perdido el rumbo.

(Foto: Vanesa Crisóstomo)