Empieza a llegar el punto final para el tiempo de los exámenes. Con una victoria 1-0 ante Lamadrid, en un partido en el que el DT Arnaldo Sialle otra vez modificó el esquema y tocó algunas piezas para asegurarse de que a los choques por los puntos se llegará con el mejor equipo posible, Atlanta volvió a sacarse un aprobado este sábado y quedó bien parado para los desafíos que vendrán.

La propuesta del entrenador esta vez fue un 4-3-2-1 con Barucco; Mancinelli, Talamonti, Martínez Montagnoli, Benítez; Guzmán, Serrano, Cortizo; Maraschi, Quiroga; y Diego Martínez. Esta vez optó por un mediocampo reforzado -Guzmán y Serrano aparecieron por primera vez entre los titulares- y con Maraschi y Quiroga algo más retrasados pero con la misión de sumarse en función de ataque cuando la jugada lo requería. En el fondo, en cambio, Sialle optó por los mismos cuatro jugadores que habían participado en los amistosos anteriores. Más allá del esquema original, el equipo en muchas ocasiones se paró con un 4-4-2, con Guzmán y Quiroga como volantes externos y Maraschi y Diego Martínez decididamente de punta.

Atlanta fue superior desde el primer minuto del partido, que como los anteriores fue de dos tiempos de 30 minutos. A Lamadrid le costaba mucho controlar los ataques del local, que a partir de la prolijidad y buena visión de juego de Serrano movía la pelota con fluidez, y además lastimaba por la subida permanente en los laterales de Benítez y Mancinelli. Justamente Lucas estuvo cerca de poner el primer gol a los 3 minutos con un remate desde la media luna del área que se perdió apenas arriba del ángulo.

El equipo de Sialle insistió en busca del primero y tuvo tres chances claras, a través de Quiroga, Maraschi y Martínez. Hasta que después de tanto ir, a los 25, llegó la justicia: Quiroga recibió un buen pase de Benítez, y ante la salida del arquero tocó al medio para que Maraschi la empujara al 1-0 con el arco vacío.

Ya en el complemento, el DT decidió probar nuevos cambios en un equipo que venía de jugar ante Almagro el día anterior. Entraron entonces Fernandes Silva, Silva, Pedrozo y Bonfigli -quien se perdería el segundo gol mano a mano con el arquero cerca del final-. El marcador ya no se movió, aunque hubo tiempo de ver un gran pase de Serrano para Martínez, que se sacó un rival de encima y definió por arriba. Y también se registró el único sacudón del partido con un tiro de Lamadrid en el travesaño que pudo haber sido el empate. Al final, con el 1-0 se selló otra prueba como para sacar buenas conclusiones.

En el segundo partido, Atlanta ganó 3-1. Formó con Dobler; Silva, Díaz Villán, Peláez, Torres; Fernandes Silva, Palisi, Galeano, Cequeira; Pedrozo y Bonfigli. El 1-0 llegó en la primera etapa luego de una muy buena jugada colectiva: pared perfecta de Galeano con Silva, quien envió el centro preciso para la definición de Pedrozo en el medio. Ya en el complemento, cuando más pegaba el sol de verano en el Gran León de Villa Crespo, Lamadrid alcanzó el empate transitorio en el segundo tiempo al aprovechar una mala salida de Dobler, pero Atlanta se recompuso enseguida. Fue con un doblete de Milton Giménez, quien ingresó en el segundo tiempo y tuvo una muy buena actuación. A los 10, puso de cabeza nuevamente en ventaja a Atlanta, y apenas cuatro minutos después presionó la salida de Lamadrid y definió con calidad por encima del arquero. Así, el juvenil dejó otra señal alentadora para el futuro, que en apenas siete días presenta el primer compromiso caliente de la temporada: en Villa Crespo contra San Carlos por la Copa Argentina.

Por Federico Kotlar. En Twitter: @fkotlar

Foto: Juan Ignacio Calcagno. En Twitter: @JuanIgnacioCalc

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