Un paso adelante y dos atrás. Parecía que el cambio de entrenador había oxigenado al grupo y que con la victoria ante Deportivo Merlo el equipo había empezado a reaccionar, pero después del paso en falso del lunes en Campana, Atlanta mostró su peor cara ante Deportivo Español y perdió sin atenuantes por 3-0.
Desde el comienzo se volvieron a ver los defectos que este equipo viene mostrando: endeblez defensiva, falta de contención y de creatividad en el mediocampo, ineficacia ofensiva. Con el orden táctico como principal cualidad, el modesto Español, que sólo había metido dos goles y todavía no había ganado en este campeonato, se adueñó del desarrollo del partido.
Los visitantes crearon las situaciones más claras del primer tiempo: Santillo tapó las dos primeras, pero a los 22 minutos Sebastián López armó una buena jugada individual por la derecha y terminó clavando la pelota en un ángulo ante la salida del arquero.
Atlanta no mostró reacción y diez minutos después, Franco Romero quedó mano a mano con Santillo -en la jugada previa pareció haber una falta a Sciorilli que el árbitro Américo Monsalvo ignoró- y puso el 2-0. La voluntad de Puch, Cequeira y Maraschi no alcanzó para descontar. Un mano a mano que el arquero Hernández le tapó al delantero a los 43’ fue lo más claro -y casi lo único- que generó Atlanta en esa etapa.
En el segundo tiempo Atlanta salió con una actitud más agresiva, pero no tuvo lucidez en el área rival. Cavallo y Ledesma –entraron por Sciorilli y Pedrozo, respectivamente- mostraron problemas en el control de la pelota, y Hernández volvió a lucirse ante Maraschi y un tiro de Cequeira.
Español jugó la segunda mitad del partido en su propio campo, esperando la oportunidad para liquidar todo con un contraataque. A los 35’, Anívole se perdió un gol increíble cuando sólo tenía que empujarla pero, ya en tiempo de descuento, Fergonzi concretó el 3-0 final y dejó a Atlanta preguntándose si ya tocó fondo o todavía puede jugar peor.
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