De a poco, parece haber empezado la reconstrucción. Luego de un pésimo inicio de campaña con cinco caídas consecutivas, que alejó prácticamente toda chance de clasificación, Atlanta recibió algunas señales positivas como para dibujar algo mejor. Si no para esta campaña, como para saber que dentro de este presente difícil hay elementos que pueden ayudar para el futuro. En ese contexto se puede encuadrar el empate 0-0 en Caseros contra Estudiantes, líder de la zona, en el que el equipo tuvo posibilidades de alzarse con la victoria y finalmente se fue con su primer punto como visitante.
Con el mismo equipo de los últimos dos partidos, Atlanta complicó en el primer tiempo al puntero y generó la mayor cantidad de llegadas. A las siempre peligrosas escaladas de Puch logró sumarle esta vez un mayor equilibrio defensivo. Estudiantes, sorprendido, buscó desnivelar a través de sus delanteros pero en general se vio superado.
Ya en el segundo tiempo, Estudiantes trató de reaccionar mientras Atlanta aguantaba a pie firme. A los 27 minutos, el árbitro Possi expulsó a Pedrozo por doble amonestación, lo que condicionó el resto del partido. Pero fue después de esta situación que Atlanta tuvo una buena chance de pasar arriba: en un tiro libre, la pelota quedó picando en el área y cuando Ríos se tiró al piso a tomar la pelota, Cavallo la empujó al gol. Possi interpretó que hubo falta sobre el arquero y anuló la acción. De ahí hasta el final, Atlanta padeció los embates de Estudiantes pero pudo mantener una igualdad importante desde lo simbólico. Aunque ya no haya chances, habrá que seguir sumando buenas señales para pensar que el futuro superará a este presente.
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