¿Y si justo después de Almirante se endereza el barco? Contaba en la semana Martín Palisi de la necesidad de un triunfo para encontrar el rumbo deseado después del doloroso tropezón contra la UAI Urquiza. Y lo que se vivió este sábado en Villa Crespo fue ideal como para cerrar heridas: 5-1 a un Brown deshilachado al que Atlanta aplastó con una gran demostración futbolística. Y al que pudo haberle convertido aún más goles si contaba con mayor efectividad para concretar la gran cantidad de chances que creó.

Por Federico Kotlar (En Twitter: @fkotlar)

El DT Arnaldo Sialle decidió volver a cambiar a fondo e introdujo cuatro modificaciones con respecto al equipo que había comenzado como titular en el último partido: entraron Torres, Silva, Talamonti, Guzmán por Benítez (lesionado), Cortizo, Peláez y Fernandes Silva. Además, Mancinelli pasó a jugar como volante por derecha, en una variante táctica que terminaría siendo clave para la historia del partido. Almirante también presentó un 4-4-2, aunque el rendimiento de los dos esquemas fue bien diferente.

Atlanta mostró una postura dominante desde el comienzo del partido. Mancinelli, con menos obligaciones defensivas, se sumaba a la ofensiva constantemente y obligaba a un esfuerzo extra a la defensa visitante. Si bien en esa posición se perdía el empuje que suele sumar Lucas con sus salidas desde el fondo de la cancha, por otro lado el equipo ganaba en equilibrio defensivo -aunque Román Díaz generó por momentos inquietud por el lado de Torres-. Y además Serrano volvía a ser, con ese toque delicioso que está muy por encima de la media de la categoría, el titiritero perfecto para manejar los hilos del mediocampo.

Pronto empezaron a aparecer las llegadas y a quedar clara la candidez de la defensa del equipo de Osvaldo Rodríguez. Pudo haber sido de Martínez Montagnoli a los 6 con un cabezazo o de Palisi a los 12, tras una buena jugada que comenzó Serrano por derecha e incluyó un par de toques precisos y rápidos dentro del área. ¿Volvía el fantasma de los goles errados que cuestan puntos? No, porque a los 19 Torres envió un centro perfecto para la entrada vacía de Mancinelli -se metió al área en absoluta soledad sin que ningún volante de Almirante se dignara a acompañar su carrera-, quien definió con un cabezazo violento para el 1-0.

Atlanta no se conformó y fue por más. Pedrozo -tuvo una actuación muy generosa a la que sólo le faltó el gol- metió un pase sutil que dejó mano a mano a Maraschi, quien definió muy alto ante la salida de Centeno. Ya habría tiempo para la revancha. Pero antes llegaría a los 29 el segundo gol de Atlanta, en el que Serrano sacó a relucir su pegada notable con un tiro de esquina que viajó con el efecto ideal para dar en la cabeza de Talamonti. Pelota peinada que viajó a la red y nuevo festejo en Villa Crespo.

Llegaría entonces un tiempo breve de incertidumbre para el equipo de Sialle. Ante el panorama desolador que vivía, Rodríguez incluyó a un delantero, Meza, por un volante, Olmedo. Y en la jugada posterior a esa modificación, cuando corrían 31 minutos, un tiro libre lejano de Román Díaz le dobló las manos a Dobler y se transformó en el descuento.

Ahí empezó a presionar con más decisión Almirante, que pudo haber empatado con un cabezazo de Machuca en otra pelota parada mal marcada por la defensa. Pero mientras tanto también Atlanta seguía desperdiciando oportunidades de gol: con un cabezazo de Talamonti, con un remate alto de Mancinelli y con otra mala definición de Maraschi tras un buen pase de Guzmán. Y entonces llegó el tiempo de la revancha del Bicho: cayó en el área un centro de Palisi, la bajó Martínez Montagnoli y de frente al arco el delantero consiguió sacarse la espina y meter de cabeza (como los dos tantos anteriores) el tercero. Se jugaban 46 minutos y el tiempo contaría el profundo efecto psicológico que tuvo ese gol, que prácticamente liquidó la historia del partido a favor de Atlanta.

El local siguió en el complemento buscando el gol ante un rival que no salía de su estupor. El árbitro Bresba ignoró un claro penal a Mancinelli a los 7, pero tan sólo dos minutos después Lucas logró su doblete y le puso cifras de goleada al partido, con un remate fuerte y abajo desde afuera del área. Terminaba de quedar claro que Villa Crespo iba a volver a vestirse de fiesta. Y mucho más cuando a los 18, en un contraataque que condujo Mancinelli, la pelota volvió a viajar al medio para la definición al gol de Maraschi, quien como en el torneo pasado le marcó dos tantos a su ex equipo.

Parecía que iban a llegar más goles, pero el local levantó un poco el pie del acelerador y el partido se cerró con un 5-1 que reflejó la contundente diferencia que hubo entre los dos equipos. Ante un Almirante con buenos pergaminos y nombres importantes, Atlanta vivió uno de sus mejores días en un largo tiempo. Y dejó flotando la sensación de que con jugadores como estos hay argumentos para soñar con más alegrías.

SINTESIS

Atlanta (5): Dobler; Silva, Talamonti, Martínez Montagnoli, Torres; Mancinelli (ST 30’ Galeano), Palisi, Serrano, Guzmán; Maraschi (ST 38’ Diego Martínez) y Pedrozo (ST 43’ Bonfigli). DT: Armando Sialle. No ingresaron: Barucco, Peláez, Cortizo y Fernandes Silva.

Almirante Brown (1): Centeno; Collavini, Machuca, Zunino, Almada; Romero (ST 19’ Centurión), Meza Sánchez, Olmedo (PT 31’ Meza), Rossi; Román Díaz y Sciorilli (ST 15’ Presedo). DT: Osvaldo Rodríguez. No ingresaron: Barros, García, Despósito y Flegenart.

Goles: PT 19’ Mancinelli (At); 29’ Talamonti (At); 31’ Román Díaz (AB); 45’ Maraschi (At). ST 9’ Mancinelli (At); 18’ Maraschi (At).

Amonestados: Torres (At), Meza Sánchez, Romero, Collavini, Rossi (AB).

Arbitro: Sebastián Bresba.

Cancha: Atlanta.

Foto: Juan Ignacio Calcagno.