Atlanta hizo méritos para reencontrar el camino de la victoria, pero chocó contra la mala fortuna, cierta impericia a la hora de definir y -otra vez- un error arbitral decisivo que lo dejó con las manos vacías. Cayó 1-0 contra Comunicaciones en Agronomía y ahora no sólo comparte la punta con Villa San Carlos sino que un importante pelotón de equipos se sumó a la pelea por el primer ascenso a la B Nacional.
Lesionado Valdez, Sergio Rondina decidió el ingreso de Mbombaj como lateral izquierdo y Segovia volvió al centro de la defensa. Atlanta salió con mucha decisión a tratar de marcar diferencias desde el comienzo. Así fue como a los cinco minutos ya había estado muy cerca de abrir el marcador, sobre todo con un cabezazo de Guzmán quien, pese a conectar sin marca en el área chica, definió desviado.
Ante un rival que se refugiaba atrás y trataba de salir de contra, el equipo de Rondina manejó la pelota y dispuso de buenas chances, pero no pudo concretar y sufrió en el arco propio. Dos distracciones en pelota parada costaron muy caro: Segovia perdió primero la marca de Lamas a los 31 y el cabezazo se fue apenas desviado; siete minutos después, Segovia volvió a quedar lejos, esta vez de Roncaniere, y el jugador de Comunicaciones la mandó adentro para poner el inmerecido 1-0.
Después se escribió una historia dolorosa y que muchas veces se repite en el fútbol: un equipo necesitado que busca el empate y ve cómo cada vez el arco rival se hace más chico, mientras enfrente lo esperan agazapados con la tranquilidad del resultado y cosechan buenas chances para llegar en una réplica a aumentar la ventaja.
Aún en ese panorama, Atlanta consiguió crear muy buenas chances de peligro -dispuso de doce claras en todo el partido- y debió haber dispuesto además de un penal a favor, si el árbitro Gastón Meineri no ignoraba de manera absurda una grosera infracción del arquero Otarola sobre Mancinelli, quien mano a mano había alcanzado a rematar por arriba antes de recibir la violenta falta.
Llegó entonces el 1-0 con la bronca renovada, pero también con la consciencia de que la historia no se terminó. Y de que este equipo supo levantarse en el pasado de situaciones similares. ¿Podrá hacerlo de nuevo?
(Foto: Vanesa Crisóstomo)
Otras notas que podrían interesarte