Desde el viernes, tu cuerpo algo cansado de los últimos tiempos descansa. Sabé que tu corazón inmenso, tu espíritu inquieto y tus ideas geniales siguen revoloteando entre nosotros acá en tu querido Centro Cultural. Estás acá presente en cada comentario y lo estarás por siempre en cada charla, en cada mirada cómplice y en cada idea que vendrá. Es como si hubieras dejado a tus discípulos: vos nos trajiste, nos invitaste a quedarnos y dejaste en cada uno de nosotros la semillita del trabajo desinteresado, de la tenacidad, del respeto y del amor incondicional al club, entre tantas otras virtudes.
Aquí nos encontramos frente a esta gran prueba de seguir adelante con el Centro Cultural sin tu guía, tu sostén y tu palabra justa. Seguiremos firmes tratando de lograrlo, como vos siempre lo hubieras deseado.
Lo demás va a sonar demasiado repetido. Ya todos lo han hecho saber a través de las infinitas muestras de cariño hacia vos. Los mismos sentimientos se repiten entre todos los que te conocieron.
Qué te lleguen al cielo cientos de besos y abrazos, miles de sonrisas y todos nuestros gritos de los goles de Atlanta que vendrán.
¡Te queremos mucho Julio!
Tus compañeros y amigos del Centro Cultural “los Bohemios Osvaldo Miranda”
Otras notas que podrían interesarte