Empate contra un duro rival

Atlanta empató 1-1 contra Deportivo Morón en Villa Crespo, en un partido entretenido, con muchas situaciones de gol para los dos equipos, y en el que el empate pareció lo más justo. Con este resultado, Atlanta quedó segundo en el campeonato -por la derrota de Villa Dálmine- aunque el puntero Platense se alejó a cinco puntos.

Morón fue algo más en un comienzo en el que a Atlanta le costó mucho manejar con criterio la pelota. El equipo de Salvador Daniele se agrupaba bien atrás y presionaba a Ferreiro y Acuña, quienes erraban más de lo que acertaban. Con este panorama, no fue extraño que el local, donde el DT Sergio Rondina eligió mantener a los mismos titulares que habían vencido a Tristán Suárez el domingo pasado, quedara más expuesto en el propio campo y empezara a sufrir en defensa.

Damián Akerman, a priori el hombre más peligroso de Morón -pero que afortunadamente estuvo impreciso para definir en Villa Crespo-, desperdició a los 20 minutos una clara chance cuando remató desviado en un mano a mano. Pero a los 29 minutos llegó el golpe del visitante: Gagliardo no salió en un córner que cayó dentro del área chica y Otermín aprovechó para cabecear a la red y marcar el primer gol.

Estuvo a punto de aumentar Morón a los 33 en otra intervención poco feliz del arquero, cuando un centro de Lezcano dio en el segundo palo. Pero a partir de ahí Atlanta reaccionó y fue para adelante, con más ganas que fútbol. Y a los 36, bien pronto, llegó el premio: otra vez -la quinta en el torneo- con una jugada preparada en un córner. Mbombaj tocó corto con Acuña, quien envió un centro bajo, y en la maraña de piernas alcanzó a rematar Segovia con una media vuelta perfecta para poner el empate. Fue el segundo partido consecutivo en el que marcó el defensor.

Algo más tranquilo, Atlanta empezó a manejar las acciones ante un Morón que sintió el golpe. Cuatro minutos después, Mbombaj puso un centro perfecto que Palisi, solo al borde del área chica, cabeceó increíblemente afuera. Era la oportunidad para darlo vuelta enseguida, y se escapó por muy poco.

En el complemento, Atlanta fue algo más. Aunque siguió sufriendo en defensa, algo que en general es imposible de evitar cuando se toman riesgos para ser más ofensivo. Creció el rendimiento de Mbombaj, quien fue muy incisivo y difícil de controlar para la defensa de Morón hasta que se quedó sin resto físico. De hecho tuvo la chance más clara cuando a los 4 minutos quedó mano a mano contra Migliardi, pero el arquero tapó su remate que salió al centro.

Así, entre llegadas de un lado y del otro aunque con Atlanta más decidido a buscar la victoria, se terminó de ir el partido. Con la sensación de que el empate no estuvo mal, pero que se podría haber conseguido algo más.

Por Federico Kotlar (En Twitter: @fkotlar)

Foto: Vanesa Crisóstomo